Material de Montaña

La elección y preparación correcta de tu mochila (Material de Montaña)

Como ya sabemos, estamos entrando en una era donde aun cuando se une los avances de las tecnologías también han surgido nuevos métodos para ser saludables y cuidar nuestra salud. Uno de ellos son los ejercicios aeróbicos, los cuales son los más adecuados para encontrar la forma, perder peso y reducir al mínimo la posibilidad de contraer alguna enfermedad cardiovascular.

Uno de estos deportes es el senderismo de montaña y los beneficios que aporta son:

1. Mejora de la salud cardiovascular: corazón, pulmones y reduce la tensión; y por tanto minimiza los riesgos asociados a enfermedades vasculares y a la diabetes.

2. Reduce el colesterol malo.

3. Incremento de la fuerza general y tonificación muscular del tren inferior.

4. Aumento de la densidad ósea, especialmente recomendable para mujeres a partir de los 40.

5. Incrementa el optimismo y reduce la posibilidad de depresiones.

6. Mejora la calidad del sueño.

7. Control del peso: el senderismo quema unas 400 calorías por hora en una persona de peso medio.

8. La actividad y el ejercicio físico moderado reducen el riesgo de muerte temprana.

 

Con todo este ejercicio no podemos olvidarnos de algo muy importante, el material de montaña que usaremos en nuestra aventura es por ello que a la hora de armar tu mochila con el material de montaña siempre debes tomar en cuenta:

1.- ¿Qué mochila debo elegir?

Lo más importante a la hora de hacer una buena elección es fijarnos algunos puntos elementales: su capacidad, la talla de la espalda, el bastidor, el cinturón lumbar y las hombreras. Los demás elementos que conforman una mochila también son importantes, pero no influyen tanto y dependerán de las actividades que vayamos a realizar.

2.- ¿Cómo Prepararla?

 No hay una ciencia exacta que diga cómo hay que preparar una mochila, va a depender de muchos factores: meteorología, duración de la excursión, estación del año… Pero en líneas generales puedes seguir estos consejos para tus excursiones resulten lo más cómodas posible.

Lo más importante es distribuir bien la carga para que la mochila no esté desequilibrada.

Almacena las cosas en bolsas de plástico transparentes: estarán más organizadas, aisladas y visibles sin tener que abrirlas: la comida por un lado, la ropa por otro, etc.

No pongas ningún objeto rígido y molesto en contacto con la espalda (puedes utilizar el chubasquero como protector).

Un exceso de peso en la parte superior o una mala colocación del saco de dormir hará que la mochila se mueva de un lado a otro.

Mochila bien equipada, pero con el menor peso posible!.

3.- Organizate

En la parte inferior lleva el material más ligero y que menos vayas a utilizar durante la marcha (por ejemplo saco de dormir, ropa de muda…),

Pegado a la espalda y en la parte superior deberían ir los objetos más pesados y rígidos, para dar mayor estabilidad. Al lado, pero en la parte que no da a la espalda la ropa que no vayamos a utilizar en el día.

Mete en último lugar lo que vayas a utilizar durante el día para tenerlo a mano: chubasquero, botiquín, guantes, alimentos,…

En la seta superior y bolsillos exteriores los objetos más cotidianos o las cosas más pequeñas: gorra, gafas (siempre en funda rígida), navaja, comida auxiliar, el mapa, cámara de fotos papel higiénico… Si tu mochila no tiene cubre mochilas no está de más que metas en una bolsa impermeable, todo lo que no debe mojarse en caso de emergencia: GPS, baterías, cerillas, medicinas…

Si no llevas camelback el agua siempre fuera, a mano y en posición vertical.

Si llevas tienda de campaña, atada en la parte inferior, por fuera de la mochila. Las esterillas pueden ir en un lateral.

Bibliografía

Montanasegura.com